miércoles, 12 de enero de 2022

HORARIO DE MISAS EN JAEN CAPITAL

A continuación una información muy útil para celebrar la Santa Misa, los horarios en Jaén.

 RECUERDA es muy recomendable comulgar en cada celebración de la Misa, para ello debes cumplir tres condiciones MUY IMPORTANTES:
  1.  Ayunar una hora antes de comulgar. (Punto 1387 del Catecismo)
  2. Tener conciencia libre de pecado grave. Si no fuera así, es necesario confesarse (Punto 1415 del Catecismo)
  3. Saber a quién se va a recibir, acercándose a comulgar con devoción.

Son días de precepto:

Todos los domingos del año.
Santa María Madre de Dios (1 de enero).
Reyes (6 de enero).
San José (19 de marzo).
Santiago (25 de julio). Propia de España.
Asunción (15 de agosto).
Todos los Santos (1 de noviembre).
Inmaculada (8 de diciembre).
Navidad (25 de diciembre).

Ésta es la lista de las fiestas de precepto comunes en España.

PARA COMULGAR CON FRUTO:
Antes de comulgar:
Actos de fe, esperanza y caridad: "Creo firmemente que estás en la Eucaristía, espero en tí, te amo...."
Actos de humildad: "Señor no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme" o pedir perdón.
Actos de deseo: "Quiero recibirte de la mejor manera"

Después de comulgar:
Todo lo que salga de tu corazón: actos de adoración, de fe, de amor, peticiones por ti, tu familia, tus amigos, por la Iglesia, el mundo... Reparación por las ofensas que recibe.

ORACIÓN
Si cuando vayas a comulgar no sabes que decir a Dios, puedes ayudarte de esta oración del gran Santo Tomás de Aquino:
Te adoro con devoción, Dios escondido, oculto verdaderamente bajo estas apariencias. A Ti se somete mi corazón por completo, y se rinde totalmente al contemplarte.
Al juzgar de Ti, se equivocan la vista, el tacto, el gusto; pero basta el oído para creer con firmeza; creo todo lo que ha dicho el Hijo de Dios: nada es más verdadero que esta Palabra de verdad.

En la Cruz se escondía sólo la Divinidad, pero aquí se esconde también la Humanidad; sin embargo, creo y confieso ambas cosas, y pido lo que pidió aquel ladrón arrepentido.
No veo las llagas como las vio Tomás pero confieso que eres mi Dios: haz que yo crea más y más en Ti, que en Ti espere y que te ame.
¡Memorial de la muerte del Señor! Pan vivo que das vida al hombre: concede a mi alma que de Ti viva y que siempre saboree tu dulzura.
Señor Jesús, Pelícano bueno, límpiame a mí, inmundo, con tu Sangre, de la que una sola gota puede liberar de todos los crímenes al mundo entero.
Jesús, a quien ahora veo oculto, te ruego, que se cumpla lo que tanto ansío: que al mirar tu rostro cara a cara, sea yo feliz viendo tu gloria.
Amén.
Santo Tomás de Aquino